Tegucigalpa/Nueva York – Millones de narcodólares más para el expresidente Juan Orlando Hernández (JOH), un exministro de Seguridad señalado de recibir una comisión por el negocio de la droga y un oficial de la Policía Nacional que admitió haber sido el responsable del asesinato del fiscal de oro, Orlan Chávez, fue lo más destacado del día 9 del llamado “juicio del siglo” que se realiza en un tribunal federal del sur de Nueva york y que enjuicia a la mayor parte de la institucionalidad hondureña.
+ Un exoficial de la Policía hondureña revela que mató al fiscal de oro y que participó en una narcofiesta y en las que vio paquetes de dólares, en la casa de Tony Hernández.
+ Fabio siguió mencionando a otros actores, entre ellos al exministro de Seguridad, Julián Pacheco.
+ El lunes se prevé cierran las presentaciones de la fiscalía.
Fabio Lobo, hijo del exmandatario Porfirio “Pepe” Lobo, continuó detallando las relaciones del mundo criminal y político de Honduras en las últimas dos décadas, tras regresar este viernes al estrado como testigo de la fiscalía, con la esperanza que su condena de casi un cuarto de siglo le sea reducida y pueda recobrar la libertad.
Lobo detalló que entregó dos sobornos al expresidente Hernández, uno de ellos en forma directa al darle una mochila que contenía 250 mil dólares.
Mientras también se nombró al exministro de Seguridad, Julián Tinoco, en el juicio de parte de Lobo, indicando que recibía de él la mayor parte de la información que entregaba al cártel de “Los Cachiros”.
Igualmente el undécimo testigo de la fiscalía, un exoficial de la Policía Nacional admitió que fue el responsable del asesinato del fiscal de oro, Orlan Chávez, ya que investigaba a un familiar suyo involucrado en el negocio del narcotráfico.
Millonarias entregas de dólares
Lobo dijo que entregó a la desaparecida Hilda Hernández, hermana de JOH, 200 mil dólares junto al otro líder cachiro Javier Rivera Maradiaga, hermano de Devis Leonel, y después 250 mil dólares directamente a Hernández. “Le enseñé el contenido de la mochila y él la llevó a su camioneta”, afirmó Lobo durante su declaración.
En otro apartado Fabio Lobo, declaró haber acompañado a Juan Antonio “Tony” Hernández, hermano de Juan Orlando y condenado a cadena perpetua por narcotráfico por el mismo juez Kevin Castel que lleva el presente caso, a recoger 4 millones de dólares de una persona identificada como “Wilson”, pero cuando se le presentó una foto lo identificó como Nery Orlando López Sanabria, alias “Magdaleno Meza”, asesinado en prisión.
Además el testigo dijo que según versión que conoció de los Cachiros “Tony Hernández era la cara de la operación y que JOH lo respaldaba desde las sombras”.
Como ocurrió el jueves, Fabio volvió a incriminar a su padre “Pepe” Lobo con el narcotráfico, cuando señaló que no estuvo presente en la reunión cuando “Los Cachiros” sobornaron a su progenitor e indicó que se dio cuenta por medio del exdiputado Juan Gómez.
Interrogado por el fiscal porque no mencionó antes dicha información, Fabo respondió que mintió porque “es difícil implicar a su padre”.
Exministro de Seguridad
En cuanto a Julián Pacheco, exministro de Seguridad y exdirector de Inteligencia, Lobo declaró que había acordado pagarle una comisión de sus ganancias del narcotráfico.
Indicó que en una reunión con informantes encubiertos de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), Pacheco le advirtió que era una trampa.
En ese sentido detalló que posteriormente, JOH habló con él y le pidió mayor discreción.
Oficial policial responsable asesinato fiscal
La fiscalía presentó al undécimo testigo identificándolo como “Giovani Rodríguez, un exoficial de la Policía Nacional de Honduras y que se encuentra preso en Estados Unidos tras declararse culpable por narcotráfico.
Aunque identificado con un seudónimo de “Giovani Rodríguez”, la prensa presente señaló que se trataba del excomisario Mario Guillermo Mejía Vargas, quien admitió haber sido el responsable del asesinato del “fiscal de oro” del Ministerio Público, Orlan Chávez.
El testigo dijo que decidió dar muerte violenta al fiscal porque estaba investigando a un primo suyo que estaba vinculado al narcotráfico.
El exoficial policial, que se entregó el 2016, indicó que su trabajo para los narcos era custodiar los cargamentos de cocaína, para lo cual utilizaba fusiles M-16 y AR-15, además de entregar información sobre los controles y operaciones policiales contra la narcoactividad.
También trabajó con el narcotraficante Víctor Hugo Díaz Morales, más conocido con el alias “El Rojo”.
Confirmó “Giovani Rodríguez” que una vez fue capturado en 2009 por robar 143 kilos de cocaína, fue a prisión, pero que recobró la libertad y logró regresar a la Policía Nacional.
Una vez que salió de prisión, señaló que de manera inmediata volvió a participar en actividades del narcotráfico, esta vez con Alexander Ardón, quien en ese tiempo era el alcalde de El Paraíso en Copán, y que también se entregó a las autoridades estadounidenses.
Narcofiestas
El exoficial de la Policía Nacional conoció a Mauricio Hernández Pineda (que se declaró culpable antes de comenzar el juicio) en la academia de la Policía Nacional, relatando que ambos se ofrecían en brindar protección a los cargamentos de droga.
“Giovani Rodríguez” indicó que en una ocasión Hernández Pineda le contó que estaba siendo protegido por los hermanos Juan Orlando y “Tony” Hernández.
El exoficial policial reveló que Hernández Pineda y él utilizaron la casa de “Tony” Hernández para varios eventos, incluso una fiesta con prostitutas.
Que en la casa de “Tony” Hernández encontró una alta cantidad de dinero envuelto en bolsa de plástico, similar al método que utilizan los narcotraficantes, “era hasta mi cinturón”, respondió cuando le pidieron calcular el monto del dinero.