La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Ana Paola Hall, desmintió y aclaró diversas denuncias difundidas por actores del proceso electoral y otros sectores externos, reiterando que ella y su equipo están comprometidos a resguardar cada voto, así como la democracia y la paz del país.
Hall explicó que “la divulgación no se vio comprometida; se hicieron los ajustes necesarios en ambos casos y el personal trabajó hasta el final de la jornada”.
Sobre las contraseñas asignadas a las diferentes fuerzas políticas, detalló que “un día antes hubo un reporte de que un miembro del grupo ASD solicitó a un técnico imprimir las contraseñas. El pleno fue informado y, en sesión convocada por mi persona, se aclaró el tema, se ordenó el cambio inmediato de las contraseñas y se realizó en pocos minutos, como consta en el acta”.
En relación con su papel como garante de la transparencia, subrayó que “la dignidad siempre ha sido el pilar de mi vida, y eso me impide actuar de forma distinta a la integridad. Rechazo contundentemente que, con base en dichos y no en hechos, se ponga en duda mi honra, mi prestigio y mi honor”.
Hall enfatizó que “no puedo meter mano para favorecer o perjudicar a nadie, y si pudiera, ni yo ni mi equipo lo haríamos. Somos el pilar que sostiene la elección y, por ende, la paz y la democracia del pueblo”.
Concluyó asegurando que “cuidaré cada voto de cada uno de ustedes con el mismo recelo y compromiso. Mi equipo, que tiene carrera en la institución, y yo nos mantendremos firmes defendiendo sus votos, la democracia, la paz del país y la labor del CNE”.
