Los hermanos Jason Enmanuel y Bryan Eusebio Guerra Estévez nacieron con cuatro años de diferencia en el hogar conformado por José Eusebio Guerra Reyes, celebrador de la Palabra de Dios, y Gladys Patricia Estévez Estévez, catequista.
Crecieron en la montaña de El Merendón, donde descubrieron su vocación religiosa en tiempos y formas distintas. Este sábado 4 de octubre recibirán el orden sacerdotal en una solemne eucaristía en la Catedral Metropolitana San Pedro Apóstol, junto a los diáconos Dixie Ballesteros Hernández y Noé Gerardo Hernández Hernández.
Jason recuerda con alegría que su inquietud vocacional nació el día en que recibió el sacramento de la confirmación. Es el tercero de cinco hermanos.
“Estábamos en una hora santa, pero yo traté de callarme ese llamado y decía: no, esto no es conmigo. Me fui a estudiar, me gradué de maestro y esa inquietud siempre estaba presente, pero no le hacía caso”, dijo.
“Siempre mi familia estuvo cercana a la Iglesia, pero mi vocación salió a flote con unos misioneros agustinos de la orden del Papa León XIV, que siempre iban de misión a El Merendón; entonces los acompañábamos a las comunidades”.
Mientras tanto, el diácono Bryan reconoce que fue su tío, el sacerdote Luis Estévez, quien sembró en él la inquietud vocacional. Luego decidió hacer una experiencia en el Seminario Menor Santiago Apóstol, con el acompañamiento del padre Javier Santos.
“Es una experiencia muy maravillosa por el hecho de que somos hermanos y tenemos una historia en común, compartimos la niñez y al crecer coincidimos en este camino vocacional. Uno ve que es una obra de Dios, porque nunca hablamos de vocación y coincidimos en el proceso de formación. Somos hermanos biológicos y hoy sacerdotes”.

El diácono, cuarto de los cinco hermanos, oficiará su primera misa en la comunidad de Santa Marta, El Merendón, mañana 5 de octubre a las 10:00 am.
Vocación y fe
La ordenación presbiteral se celebrará hoy a las 9:00 am en la Catedral Metropolitana San Pedro Apóstol. Monseñor Miguel Lenihan oficiará la Santa Eucaristía y presidirá el rito de ordenación sacerdotal.
Dixie Ballesteros Hernández nació el 27 de noviembre de 1998 en San Antonio de Cortés. Es hijo de Dixie Ballesteros Mencía y Deisy Arelí Hernández Ayala, y el mayor de cuatro hermanos. Realizó sus estudios primarios en la Escuela 18 de Noviembre y los secundarios en el Instituto Soberanía.
En 2014 ingresó al Seminario Menor Santiago Apóstol de la Arquidiócesis de San Pedro Sula, donde culminó estudios en el Instituto San Vicente de Paúl.
En 2016 ingresó al Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa, del cual egresó en 2023 como licenciado en Filosofía y Teología. Es hijo vocacionado de la parroquia San Antonio de Padua de San Antonio de Cortés y realizó su experiencia pastoral en la parroquia Nuestra Señora de la Visitación, Dos Caminos, acompañado por el padre Natael Perdomo.
Por su parte, Noé Gerardo Hernández Hernández nació el 9 de junio de 1997 en Otatala, Masaguara, Intibucá. Es hijo de Antonio Hernández y Esperanza Hernández, y el menor de seis hermanos. Cursó la primaria en la Escuela Juan Manuel Gálvez Durón y en el Centro de Educación Básica El Esfuerzo.
Sus estudios secundarios los realizó en el Instituto Oficial José Trinidad Reyes de San Pedro Sula. En 2015 ingresó al Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa, del cual egresó en 2023 como licenciado en Filosofía y Teología.

Es hijo vocacionado de la parroquia La Visitación de Dos Caminos, Villanueva, Cortés, y realizó su experiencia pastoral en la parroquia El Buen Pastor de San Pedro Sula, acompañado por el padre Gustavo Adolfo Fuentes Gómez.
Los cuatro jóvenes fueron ordenados diáconos el pasado 1 de marzo. Cada uno sirvió en diferentes parroquias: Jason Enmanuel Guerra Estévez en Nuestra Señora de Guadalupe de La Lima; Bryan Eusebio Guerra Estévez en la Exaltación de la Santa Cruz de Baracoa, Cortés; Dixie Ballesteros Hernández en San Miguel Arcángel de Potrerillos; y Noé Gerardo Hernández Hernández en El Buen Pastor de San Pedro Sula.
La Iglesia católica celebra con alegría esta ordenación. Las familias de los nuevos sacerdotes agradecen a Dios, e invitan a la feligresía a participar en la misa, donde estará presente todo el presbiterio de la arquidiócesis, acompañando a su obispo Miguel Lenihan, ya recuperado en su salud.