Autoridades de la secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional , han informado este jueves, que, a partir del viernes 31 de enero estaría arribando al país el primer vuelo militar con hondureños deportados por parte de los Estados Unidos.
El vicecanciller, Gerardo Torres, señaló que “el mecanismo viejo, el DHS, utilizado antes siempre se seguirá usando, pero ha entrado en vigor el nuevo mecanismo, el cual es usar aviones militares de Estados Unidos para traer gente deportada, a Honduras no han llegado pero muy pronto estarán arribando, lo que pedimos es respeto a las condiciones mínimas de las personas”.
Organizaciones defensoras de derechos humanos afirman que el Gobierno debe asegurar a los hondureños retornados, seguridad de verdad, ya que muchos de ellos, abandonaron Honduras debido a amenazas, delincuencia, extorsión y otros asuntos relacionados con la violencia.
“Hondureños que salieron del país huyendo por cuestiones de amenazas, por extorsión, que le han asesinado a un familiar y no pueden regresar al país, ya que al hacerlo su vida y su integridad estaría en riesgo por lo que la Cancillería debe dar una respuesta junto con la Secretaría de Derechos Humanos”
Según, Wilson Paz, director del Instituto Nacional de Migración (INM), “El tema de las deportaciones masivas es un tema que se debe de construir, es una decisión bilateral, el tema migratorio es un tema que nos puede llevar a tener diferencias, pero la Presidenta antes llama a un diálogo y posteriormente hay temas que podemos revisar como las bases militares estadounidenses en territorio hondureño”.
Cabe mencionar que, ante las medidas migratorias tomadas por los Estados Unidos, diversos gobernantes de Latinoamérica han expresado su preocupación ante las masivas deportaciones, esto debido a los tratos a sus connacionales y la importancia de estos en la economía de sus países.