GORRAS. Pues, hombre, Hilario, la buena noticia es que ya salieron las gorras roji-negro con la leyenda “Rixi presidenta”. Qué más le podemos pedir los hondureños a la Divina Providencia.
PAGO. No le han pagado a los empleados del SANAA, del 911, de Hondutel y sepa Judas qué otras instituciones -les deben cuatro meses y el catorceavo- y la responsable de ese desmadre, la ministra de Finanzas, ya anda en abierta campaña. Pobre, pueblo, pobre…
URGE. El “papi” reapareció el fin de semana con sus burros todoterreno, en barrios y colonias de SPS y Choloma, donde fue recibido por una algarabía de nacionalistas que le pidieron que se vuelva a lanzar a la guayaba. ¡Urge el papi! fue la consigna.
SUR. Pero, el negrito Zelaya no se queda atrás y también anduvo de gira, solo que en la zona sur, en los dominios de “Radio Viejo” y compañía.
INICIA. Hombre, el próximo fin de semana inicia el Feriado Morazánico y la flamante ministra de Turismo -a casi dos años de gobierno- no asoma el cacho por ningún lado.
FERIA. Por cierto, pasó la feria agostina salvadoreña y aquí ni cuenta se dieron, contrario a otros años, que había gran algarabía y eran recibidos en la frontera de El Amatillo.
GALLO. Hombre, si Libre apoyara el turismo y se interesara en generar trabajo, con el mismo ímpetu que pelea por imponer -sin votos- el fiscal y violar la ley cuantas veces sea necesario -como pasó con el CAF- otro gallo le cantaría a la pobre Honduras.
PODER. Avisa Evo Morales que vuelve, como McArthur, por la guayaba, porque no se conforma con el títere que tiene. Estos Z de M… como les dice Milei, son igualitos en todos lados, nunca quieren soltar el poder y vengativos como solo ellos. Allí sigue presa la pobre Jeanine Añez.
TREN. Mientras Bukele firma convenio con Google para convertir su nación en el “centro tecnológico de Centroamérica”, echa a andar el ferry con Costa Rica, y ahora va por el “tren del Pacífico” de alta velocidad, aquí seguimos agarrados de las greñas.
BUENO. Difícil que una persona -no importa cuál sea su ocupación- haga algo bueno y se preocupe por el progreso de su pueblo, si tiene el corazón lleno de odio y de rencor, y no piense en otra cosa que en venganza.