By Con apenas 252 días restantes en la administración de la presidenta Xiomara Castro, el panorama es desalentador.
“El memorándum de entendimiento vence el 15 de junio. Veremos si hay voluntad para extenderlo por quinta vez”, advirtió Aguilar, quien recordó que el convenio, firmado hace más de dos años y medio, no ha producido avances tangibles. “La última acción del Gobierno fue en septiembre del año pasado, cuando entregó un segundo borrador del convenio. Desde entonces, no ha pasado nada”, enfatizó.
El proceso de negociación, que busca establecer un ente internacional para combatir la corrupción en el país, se encuentra estancado. Aguilar señala que los obstáculos no son técnicos ni diplomáticos, sino políticos. “Es difícil avanzar si el Congreso no elimina leyes como la inmunidad parlamentaria o no legisla sobre temas clave como el enriquecimiento ilícito, el lavado de activos y el secreto bancario”, explicó.
Consultado sobre las verdaderas trabas, Aguilar fue enfático: “En eso sí se ponen de acuerdo los políticos, en no avanzar”. Para el representante de ASJ, las élites partidarias y las estructuras de poder temen las consecuencias de una verdadera lucha contra la corrupción, y por eso frenan cualquier intento de reforma o negociación seria.
La falta de voluntad política, sumada a la inacción del Gobierno, ha socavado una de las principales promesas de campaña de la presidenta Xiomara Castro. “El Gobierno queda mal parado. Si usted no cumple su principal promesa, eso debe pasarle factura. Se creyó en un plan de lucha contra la corrupción que no se cumplió”, criticó Aguilar.
El desencanto ciudadano crece al ver que el tiempo pasa sin resultados concretos. “Hace más de seis meses que no se ha hecho absolutamente nada. El pueblo hondureño lo lamenta. El principal mal de Honduras tiene su origen y desarrollo en la corrupción”, concluyó.
